La Fontana de Trevi
En el año 1732 el arquitecto Nicola Salvi ganó el concurso convocado por el Papa Clemente XII e inició a construir esta célebre fuente en estilo rococó, que fue terminada en el año 1762 por Giuseppe Pannini.
El monumento- cuya agua proviene de uno de los acueductos romanos más antiguos, el del Agua Virgen – representa a Océano sobre un carruaje con forma de concha tirado por dos caballos marinos y conducido por tritones.
Antes de alejaros del monumento, no olvidéis lanzar una moneda a la fuente, para que tengáis asegurado el retorno a la Ciudad Eterna. Si, por el contrario, lo que estáis esperando es el gran amor de vuestra vida y por ende italiano, entonces tendréis que lanzar dos monedas; y si pretendéis casaros prontos, deberéis echarle tres monedas.
Una curiosidad: la Fontana escenario excepcional de una escena de la famosa película de Federico Fellini titulada “La Dolce Vita”, durante la cual la sensual actriz Anita Ekberg se bañaba en la fuente vestida con un provocador vestido negro, mientras requería la presencia de Marcello Mastroianni.